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domingo, 11 de noviembre de 2012

Cuando falta una madre...

Cuando falta una madre haces cosas estúpidas, realmente estúpidas, cosas como tatuarte la espalda, irte lejos muy lejos, gritarle a tu familia y amigos, subir en carros de extraños, enamorarte muy rápido, escuchar a todo el mundo, no escuchar todo el mundo, comer deseperadamente, llorar por las puras, sentirte desamparado...
Hasta que algo mágico ocurre... Derrepente tú 
te conviertes en madre y entoces la historia se invierte... y empiezas a pensar claramente, tus sentidos se agudizan, tu sangre empieza a correr más fuerte dentro de ti como si despertaras a la vida y al mundo y piensas: toda persona necesita esa "hada madrina", esa guía que te escucha y entiende que no te juzga de corazón o por envidia, sino q trata con lo que puede y tiene a la mano de hacer que seas feliz, toda persona necesita de esa voz consejera, incondicional que siempre esta dispuesta, yo sé que no la entendemos la mayoría del tiempo, q nos cuesta tenerla en la vida y que no persiga con sus cosas, pero creánme cuando no la tienes es mil veces peor, es como caminar sin una linea en el piso que te indique más o menos por donde pisar, es un sin fin de dudas y errores, de poqué's? O para qué's? Un vacío adentro en las entanñas, en el corazón, una insertidumbre, una eterna indecición en la vida que puede ser eterna o que puede cambiar cuando te ves en la situación de que ahora TU misma eres "esa hada madrina de alguien" y que lo único que quieres en la vida es hacer un buen trabajo, ayudar y estar ahí, tener la dicha de poder estar ahí por si te necesita....
Por años he creído que ella no ha estado, que me dejó, y cómo pudo dejarme?? Cómo se atrevió a abandonarme??? Pero hasta ahora entiendo que JAMAZ ha sido esa su intención y que lo que decía era realmente cierto; "ni muerta dejaré de quererte" yo sé...desde algún lejano lugar digues todos los días viéndome y gritando fuerte hacia mi corazón: "no lo hagas, hazme caso, por ahi no, esa persona no, vas bien, sigue asi..."
Puede hacerme falta una madre para tocarla o abrazarla, si, pero no me hace falta su amor, su amor no murió, su presencia continúa de alguna extraña manera aquí, como un dejavú inexplicable y a mi lado todo el tiempo.
Natalia.

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